Un perro joven encontrado vagando como callejero con una cabeza del tamaño de una calabaza no solo se recuperó sino que prosperó hasta convertirse en una inspiración para los defensores del bienestar animal y los niños.
Gus fue visto por primera vez deambulando por un barrio abandonado en Houston, Texas. Estaba sucio y herido y tenía la cabeza extremadamente hinchada. Alguien publicó una foto de él en Facebook que llamó la atención de Houston K-911 гeѕсᴜe.
Los rescatistas acudieron a la zona y comenzaron a buscar en un complejo de apartamentos abandonado. Fue el hedor que produjo lo que los llevó directamente hacia él.
“Estábamos a punto de pasar por allí, cuando notamos la abertura y miramos hacia adentro con una linterna. Al cabo de unos segundos comentamos lo mucho que apestaba allí dentro. Estábamos a punto de entrar a mirar una habitación que hay dentro cuando el perro salió paseando”, escribió la organización de rescate en Facebook.
Estaba muy asustado pero lograron engañarlo y colocarlo en una trampa. Cuando Anna de Houston K-911 llegó al veterinario para verlo por primera vez, lloró.
“No tenía esperanzas y todavía eга un cachorro”, dijo Anna. “Tenía sólo 10 meses”.
A Gus le habían enrollado un cordón de zapato alrededor del cuello que se le incrustó a medida que crecía. No sólo eso, sino que lo había atropellado un coche y tenía la pelvis rota y tenía 26 perdigones incrustados en la pierna.
Pero él nunca se quejó. Durante todo el tratamiento fue “muy dócil”, dijo Anna. “Estaba muy dispuesto a que lo ayudáramos… Lo tomó como un soldado”.
Fue un proceso largo y Gus estuvo en el һoѕріtаɩ durante un mes entero, después del cual se fue a casa con Anna para recuperarse. Ella notó que se convertía en un perro relajado y feliz cuando se sentía mejor.
Anna dice que la intención eга adoptarlo, pero él se adaptó tan bien a su familia que ella decidió que no se iría a ningún lado y que se quedaría con ella.
Luego ganó el premio һeгo Dog para perros de refugio y, debido a su increíble temperamento tranquilo, ahora visita a los niños en la escuela para contar su historia y ayudarlos a aprender sobre el bienestar animal.
¡Realmente es una inspiración para todos!