Era como la escena de la exitosa película Madagascar, cuando el hambriento león Alex ve a su amigo Marty la cebra como su próxima comida.
Pero, como en la película, este león se quedó hambriento después de haber elegido hacer esta cruz de cebra en particular, y fue recompensado con una poderosa patada en la cara.
¡Toma eso! Las patas traseras de la cebra golpean la cara y la mandíbula del león, dejándolo aturdido, pero poco después vuelve a perseguir al animal.
En ellos, la cebra, que felizmente ignoraba que una manada de leones acechaba para almorzar, pasea casualmente por los pastizales.
¿El fin? El león atrapa fácilmente a la asustada cebra y se agarra al lomo del desesperado animal antes de hundir sus dientes en su carne.
Agachándose, zambulléndose y tejiendo: la cebra utiliza todas sus fuerzas para luchar contra el león antes de asestarle el poderoso golpe con sus patas.
Y con un gran dólar, la cebra logra atrapar al león en la cara, tirándolo al suelo.
Esta vez no: el león, con las fauces bien abiertas y preparadas, salta hacia la pata de la cebra, pero logró escapar
“Él no sabía por completo que estaban allí y la señora que estaba a mi lado comenzó a gritar ‘corre, cebra, corre’, pero no hizo caso.