La vida para una madre perrita sin hogar puede ser absolutamente dura. Y cuando se suman cachorros a la ecuación, todo se convierte en una verdadera pesadilla.
No solo que tienen que preocuparse por buscar con desesperación un refugio seguro para proteger lo que más aman, sino que a menudo tienen que soportar la indiferencia de la gente, y hasta la inclemencia de verdaderas lacras humanas que se atreven a hacerles daño.
Stephanie Brooks paseaba por Nueva Jersey, Estados Unidos, cuando la escena de una perrita con un cachorro colgando de su hocico, la devastó por completo.
Parecía que se trataba de una callejerita joven que acababa de dar a luz. Stephanie había capturado a la perrita y la mantenía segura en una pequeña área de su casa, junto a sus demás cachorros.
Cuando los rescatistas llegaron encontraron una escena profundamente desgarradora, la madre protegía fuertemente a sus bebés con su cuerpo, por lo que sacarla de allí sería una labor complicada.
Estaba demasiado asustada y no hacía más que gruñir, pero en el fondo quería ser ayudada
Con la ayuda de una trampa, finalmente lograron levantarla de ahí. Pero lo hizo cuidadosamente, asegurándose de no pisar a sus bebés.
La forma en que la madre se acercó a sus rescatistas les dejó en claro que eга una perrita tremendamente dulce, y ellos a su vez, le hablaban diciéndole que ellos no querían hacerle daño, y que estaban allí para ayudarla.
Ella entendió el mensaje, e increíblemente incluso permitió que maniobraran a sus 7 bebés, pero tristemente uno falleció.
La llamaron Jade porque eга como un diamante precioso
Los rescatistas vieron que sería el momento adecuado de trasladar a la madre y a los pequeños a su refugio, para atenderlos y que ninguna vida más se pierda.
Tuvieron que hacerlo enseñándole a la madre todo el tiempo sus cachorros, porque sino se ponía muy ansiosa y desesperada. ¡Pobrecita!
Ya en la clínica veterinaria, afortunadamente confirmaron que todos los cachorros estaban sanos y no requerían de mayores cuidados.
Pero, a pesar de que todo parecía marchar de maravilla, Jade todavía daba muestras de una angustia indescriptible. Y los rescatistas no lograban entender qué le podía estar pasando.
Sin embargo, luego le pesó tanto la conciencia de haber separado al bebé de su madre, que confesó lo que había hecho.
La pobre madre lloraba en silencio a su pequeño y no supo cómo decirles a sus héroes que le faltaba un bebé. Fue así como de inmediato organizaron para que Jade se reencontrara con su bebé perdido.
Mira el momento en que esta admirable madre se reúne por fin con su cachorrito:
Después de ocho semanas de infinito amor y de un cuidadoso amoroso por parte de sus rescatistas, ahora todos los cachorros estáп listos para ser adoptados.
Esta historia podría haber terminado terriblemente de muchas maneras, pero debido a la llamada oportuna de Stephanie, y que la vecina entró en razón, Jade volvió a ser todo lo feliz que podía ser junto al bebé por el que tanto lloró. Las madres perrunas son maravillosas, ¡si tan solo pudieran hablar!