Perrita Liberada: Tras Años con una Pesada Cadena, Recupera la Esperanza y Encuentra la Felicidad en una Nueva Vida

Tilly es el nombre de nuestra hermosa protagonista, una perrita que fue liberada de una pesada cadena que por mucho tiempo la agobió y limitó gran parte de sus movimientos.

perrita

La operación de rescate se realizó en el condado de Gaston, Carolina del Norte, donde Tilly y otros amigos de cuatro patitas dejaron atrás ese pasado lleno de dolor que lamentablemente les dejó notables cicatrices en sus peludos cuerpos.

La emocionante noticia se dio a conocer a través de la página de Facebook de la Sociedad Protectora de Animales, en la publicación se lee:

“La vida de Tilly es muy diferente ahora. Rescatamos a Buttercup, ahora conocida como Tilly, y a otros perros de una sede que operaba pelea de perros en el condado de Gaston, Carolina del Norte.

Los perritos estaban al aire libre con cadenas pesadas y visiblemente maltratadas, Tilly fue quien más llamó la atención, estaba no solo aislada de los otros perritos sino que lucía cabizbaja, su mirada trasmitía tristeza y dolor.

Increíblemente, cuando los rescatistas llegaron ella intentó acercárseles, pero la cadena impidió que llegara hasta donde estaban quienes terminaron en convertirse su salvavidas.

Tras su liberación cayó rendida ante las caricias de sus rescatistas.

No fue sino hasta que Morgan y parte del equipo se acercaron hasta la perrita que lograron liberarla y ella sin dudarlo, los recibió con más dulces besos y caricias, reconocía que eran buenas personas y sin miedo alguna les demostró su amor.

Los perritos usados para esta cruel actividad requieren de aislamiento y poca o nula sociabilidad, provocándoles ansiedad y frustración.

Tilly al igual que el resto de los peluditos pasaron por un proceso de adiestramiento y educación, por suerte, todos respondieron de la mejor manera y al poco tiempo fueron adoptados.

Esta vez, estos adorables perritos lograron un final feliz, pero lamentablemente, aún quedan muchos animales padeciendo bajo el poder de seres inescrupulosos que los usan para sus intereses personales.

Como amantes y defensores de los animales es nuestro deber pronunciarnos en contra todos los tratos injustos y sancionar a los responsables de esta cruel actividad, que fomenta la violencia y daña profundamente el tejido social.